Das Erste Spanische Lesebuch für Anfänger Band 2 (Gestufte Spanische Lesebücher)

difíciles a los estudiantes. 
    Un día el profesor decide hacer una prueba. Ofrece una interesante tarea sobre dos vecinos. Los vecinos viven muy cerca el uno del otro. Están separados solo por una valla. A un lado de la valla crece un manzano. Hay un parterre con tulipanes al otro lado de la valla. El parterre pertenece al otro vecino. Pero el manzano es muy grande. Sus ramas cuelgan sobre la valla en el jardín del otro vecino. Las manzanas caen justamente sobre el parterre y rompen las flores. El profesor pregunta a los estudiantes cómo resolvería el juez esta disputa en un tribunal.
    Algunos estudiantes creen que el propietario de los tulipanes tiene razón. Otros dicen que el dueño del manzano tiene razón. Evocan diferentes leyes que prueban que tienen razón. Los estudiantes discuten la tarea unos con otros con entusiasmo. Pero en ese momento el profesor les pide que detengan la disputa.
    “Cada uno de vosotros tiene su propia opinión,” dice el profesor, “Ahora abrid vuestras libretas de pruebas y escribid detalladamente vuestra solución a la tarea, por favor.”
    La clase queda en silencio. Todos están escribiendo sus respuestas en las libretas. Robert escribe que el dueño de los tulipanes tiene razón y explica su opinión detalladamente.
    La clase termina al cabo de una hora y el profesor recoge los trabajos de los estudiantes. Coloca las pruebas juntas en su maletín y está a punto de marcharse. Pero los estudiantes le piden que se quede un ratito. Están interesados en saber cuál es la solución correcta a la tarea.
    “Sr. Profesor, ¿cuál es la respuesta correcta?” pregunta Robert, “¡Todos queremos saberla!”
    El profesor ríe astutamente.
    “Veréis,” responde el profesor, “es muy sencillo. Los tulipanes florecen en primavera. Y las manzanas solo caen en otoño. Por eso las manzanas no pueden caer sobre los tulipanes. Esa situación no puede ocurrir.”
    Los estudiantes comprenden que tiene razón con asombro. Y eso significa que sus respuestas son incorrectas y que sacarán notas bajas en la prueba.
    “Pero Sr. Profesor, después de todo, hicimos muy buenas pruebas,” dice uno de los estudiantes, “Conocemos las leyes bastante bien. No puede darnos notas bajas solo por culpa de unos tulipanes.”
    Pero el profesor sacude la cabeza.
    “No es suficiente con conocer las leyes,” explica, “¡Primero deberíais usar el sentido común y solo después pensar en los artículos de las leyes!”
     

    Tulpen und Äpfel
     
    Robert studiert gerne. Und eines seiner liebsten Fächer ist Rechtswissenschaft. Der Lehrer der Rechtswissenschaft ist ein älterer Professor. Er ist sehr streng und gibt seinen Studenten oft schwierig Aufgaben.
    Eines Tages beschließt der Professor einen Test zu machen. Er stellt eine interessante Aufgabe über zwei Nachbarn. Die Nachbarn leben sehr nahe beieinander. Es steht nur ein Zaun zwischen ihren Grundstücken. Auf der einen Seite des Zauns wächst ein Apfelbaum. Es gibt ein Blumenbeet mit Tulpen auf der anderen Seite des Zauns. Das Blumenbeet gehört dem anderen Nachbarn. Aber der Apfelbaum ist sehr groß. Seine Äste hängen über den Zaun in den Garten des anderen Nachbars. Die Äpfel fallen genau in das Blumenbeet und zerstören die Blumen. Der Professor fragt die Studenten, wie ein Richter im Gericht diesen Streit lösen würde.
    Einige Studenten glauben, dass der Besitzer der Tulpen recht hat. Andere sagen, dass der Besitzer des Apfelbaumes recht hat. Sie nennen verschiedene Gesetze, die beweisen, dass sie recht haben. Die Studenten diskutieren enthusiastisch die Aufgabe untereinander. Aber an dieser Stelle bittet sie der Professor, den Streit zu beenden.
    „Jeder von euch hat seine eigene Meinung“, sagt der Professor. „Öffnet jetzt bitte eure Notizbücher für den Test und schreibt bitte eure Lösung für diese Aufgabe im Detail auf.“
    Es wird still im Klassenzimmer. Alle schreiben ihre Antworten in die Notizbücher. Robert schreibt, dass der Besitzer der Tulpen recht hat und erkärt seine Meinung im Detail.
    In einer Stunde geht die Vorlesung zu Ende und der Professor sammelt die Arbeiten der Studenten ein. Er steckt alle Tests zusammen in seinen Koffer und ist kurz davor wegzugehen. Aber die Studenten bitten ihn, noch eine kurze Weile zu bleiben. Sie sind daran interessiert zu wissen, welche Lösung der Aufgabe die richtige ist.
    „Herr Professor, was war die richtige Antwort?“, fragt Robert, „wir wollen es alle